Un hombre fue condenado a 6 meses de prisión efectiva por el delito de encubrimiento, luego de que se probara que adquirió una motocicleta que era robada, conociendo tal procedencia delictual. Sobre el hombre pesaba otra condena que se unificó a la presente a pedido de la Fiscalía y ya se encuentra cumpliendo las mismas en la Unidad Federal 12.
El legajo penal se inició el 20 de febrero pasado cuando una persona dio aviso al Servicio 911 que una pareja transitaba en pleno centro de la capital provincial, a bordo de una motocicleta que un amigo suyo había denunciado como robada algunos días antes.
En el procedimiento policial, agentes de prevención aprehendieron al hombre que intentó escapar del lugar pero fue detenido de forma inmediata. Seguidamente el fiscal interviniente dispuso pericias y pudo constatarse que el moto vehículo tenía pedido de secuestro por lo que inició el correspondiente legajo penal que, apenas cuatro meses más tarde, culminó con esta condena.
A la misma se arriba a partir de un procedimiento abreviado sustentado en prueba obtenida que convenció al hombre de aceptarlo. El mismo implicó un reconocimiento del hecho de manera explícita ante las partes en el marco de una audiencia judicial y la posterior aceptación de la calificación legal y la pena prevista.
La Fiscalía requirió en dicha oportunidad que la misma sea unificada con otra que quedó firme en las últimas semanas, por lo que se dispuso de forma inmediata el traslado del hombre a la Unidad Federal 12 de Viedma para iniciar el cumplimiento de una condena única por cinco años.
Distinta resultó ser la situación de la mujer a la que también se le formularon cargos pero, al no contar con antecedentes penales y por la entidad del delito y la pena prevista, puede acceder a una salida alternativa que las partes se encuentran evaluando en este momento.