Por la ampliación que se hizo en el 2015 del ejido de Viedma no hubo una compensación económica del nivel provincial al municipal para cubrir servicios y resguardo medioambiental que estaban a cargo de la administración central. De allí que se hace necesario un fondo que permitirá, entre otros objetivos, superar las dificultades que presenta actualmente la concesión del servicio de transporte público Viedma-El Cóndor-La Lobería.
La concejala Vanessa Cacho Devincenzi presentó en este marco un proyecto de comunicación dirigido a la Legislatura de Río Negro y los distintos bloques legislativos para que se constituya por ley un Fondo de Reparación Histórica al municipio de Viedma, complementario a la ley 5075 de ampliación de su ejido hasta Bahía Creek.
Indicó que el Fondo deberá tener una vigencia de 10 años y los recursos a transferir al nivel municipal tendrán un carácter anual establecido en el presupuesto provincial.
Ejido
Recordó que la ley que amplió el ejido hasta Bahía Creek sin dudas constituyó un avance en función de corregir la interrupción del ejido municipal desde la salida de Viedma hasta poco antes de El Cóndor -que afectaba derechos de los vecinos residentes en ese tramo-, además de otorgar la posibilidad que el gobierno local comenzara a planificar en toda esa área de gran potencial turístico, entre otros.
Dijo que no obstante “no contempló a la vez una compensación económica del nivel provincial al municipal en función que toda esa extensa zona –que abarca zonas de secano y regadío, ribereñas y marítimas del Departamento Adolfo Alsina- exigía y exige por sus características destinar un nivel importante de recursos para cubrir servicios y resguardo medioambiental”.
Fundamentó que aún con la incorporación de toda esa extensión a la jurisdicción municipal, hay competencias en determinadas áreas y vías de comunicación que indudablemente le corresponden a la provincia.
“Basta ejemplificar con el servicios de transporte público automotor entre Viedma-El Cóndor-La Lobería que transita por una ruta de carácter provincial como es la Nro. 1, así como las villas turísticas de La Lobería y Bahía Creek donde se cruzan prestaciones municipales, como la de recolección de residuos, con políticas de resguardo de su fauna y flora de atribución provincial”, aseveró.
Recordó que la ampliación del ejido implicó para el municipio toda una carga de recursos relativa a prestar servicios de recolección de residuos, transporte público automotor, poder de policía, concesiones, servicio de guardavidas, tierras fiscales y desarrollo urbanístico, entre otras.