La Diputada nacional Lorena Matzen acompañó el proyecto presentado por Gonzalo Del Cerro, para autorizar el uso compasivo de ibuprofeno inhalado, en instituciones de salud públicas y privadas de todo el territorio nacional, habilitando el tratamiento de emergencia en pacientes con cuadros graves de Covid19.
La indicación de uso compasivo de medicamentos aplica cuando la presencia de enfermedades graves, terminales o de una denominada enfermedad rara – a la que puede asimilarse la situación actual de pandemia – causada por un virus inicialmente desconocido, deviene en la falta de un tratamiento específico o de probada eficacia, porque los tiempos que requiere la demostración científica de un medicamento apropiado, supera ampliamente la diseminación de la enfermedad.
El tratamiento con Ibuprofenato de sodio hipertónico nebulizable es algo completamente innovador: su acción terapéutica es antiinflamatoria, bactericida así como viricida, y está destinada al potencial tratamiento de afecciones pulmonares, entre ellas el nuevo coronavirus causante de COVID-19. La idea surgió hace siete años, y es de Dante Beltramo, investigador principal del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) y del Centro de Excelencia en Productos y Procesos de Córdoba (Ceprocor), quien modificó la molécula del ibuprofeno haciéndola 100% soluble en agua para administrarlo en nebulizaciones, con el objetivo de tratar a pacientes con fibrosis quística, una enfermedad genética con altas tasas de mortalidad que afecta a niños y adolescentes. Actualmente, con la posibilidad de establecer protocolos de tratamientos compasivos ampliados, Beltramo empezó a investigar con el aval del gobierno cordobés, si era posible aplicar la molécula para el covid-19, a partir de sus propiedades como antiinflamatorio de acción local para una hiperinflación pulmonar de etiología viral.
En esa línea tiene lugar esta iniciativa parlamentaria, que tiene base en los resultados dados a conocer por la Sociedad Argentina de Neumología, obtenidos en Córdoba, Buenos Aires, Jujuy, Santa Fe, La Rioja, Salta y Tucumán, que suman más de 300 personas sometidas a este tratamiento y reportan mejoría de los pacientes luego de iniciar la medicación.
Respecto de la idea central del proyecto, dijo Matzen que “lo que pretendemos es ofrecer una respuesta legislativa hasta tanto el producto se encuentre aprobado y autorizado para uso comercial en el territorio nacional por la ANMAT, o hasta que la evaluación del plan de tratamiento por parte de la autoridad de aplicación lo indique”.
Para instrumentar el procedimiento, la iniciativa crea un “Comité Externo para la implementación del Uso Compasivo Ampliado (UCA)” integrado por cinco (5) profesionales que deberán ser designados por el Ministerio de Salud y que tendrá por función evaluar la pertinencia del Plan de UCA y los avances aportados por el Referente Médico responsable, que cada centro prestacional deberá designar para conducir el tratamiento.
El proyecto dispone además que la provisión del producto estará a cargo del Centro de Investigación en Medicina del Ministerio de Salud Pública y autoriza al organismo a llevar adelante la contratación del servicio que requiera la implementación de la ley.