Movilizó ATE y la CTA para demandar el adelantamiento de la paritarias

“La contundencia del paro de ATE y el poder de convocatoria en todos los rincones de la provincia hablan por sí solos”, dijo Rodrigo Vicente, secretario general electo de ATE Río Negro, en referencia a las movilizaciones regionales que tuvieron su epicentro en Viedma, Cipolletti, Roca y Bariloche para demandar el adelantamiento de la paritarias en el estado provincial y en todos los municipios.

Indicó que “los trabajadores organizados en nuestros sindicatos y movimientos sociales no queremos ser la variable de un nuevo ajuste hasta diciembre, ni después”.

Precisó que “los destinatarios del mensaje son claros. Queremos un cambio en la política económica del Gobierno nacional y una urgente recomposición salarial en Río Negro y los municipios de nuestra provincia. El Estado no puede mirar para otro lado. Debe instrumentar las medidas a su alcance para paliar la crisis”.

Y denunció que a diferencia de otros trabajadores, los estatales provinciales y municipales, y los jubilados fueron discriminados de las políticas paliativas anunciadas por el Gobierno Nacional.

Aseveró además que “los trabajadores provinciales, municipales y jubilados somos los más perjudicados» y agregó que “no fuimos alcanzados por las medidas adoptadas por Nación luego de la derrota electoral del Gobierno” y alertó que “en estos días en la Patagonia se ha disparado el precio de los productos de consumo básicos y se ha encarecido el boleto en varias ciudades. Estamos en una olla a presión a punto de explotar”.

En esa línea, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) señaló que llevó adelante “un contundente paro, con un altísimo acatamiento que superó el 85% en todos los sectores” para demandar el adelantamiento de la paritarias en el estado provincial y en todos los municipios.

La medida de fuerza se enmarcó en el paro decretado por el sindicato a nivel nacional y la jornada de protesta de la CTA Autónoma en todo el país junto a las organizaciones sociales, en demanda de un salario mínimo de $31.200 y la prórroga de la ley de Emergencia Social que vence en diciembre.

En Río Negro, el sindicato y la central obrera protestaron y bloquearon los puentes que unen la ciudad de Cipolletti con Neuquén. Hubo además movilizaciones regionales, en las ciudades de Bariloche, con movilización a la sede de la secretaria de Trabajo de la Nación, en Viedma, con protestas en la sede administrativa de la SENAF, en Roca, y en otros puntos de la provincia junto al MAP, ODEL, la CCC, CTEP, Barrios de Pie y sindicatos de base.

ATE reclamó al Gobierno de Río Negro y los municipios a que reabran las paritarias ante la profundización de la pérdida de poder adquisitivo y la ausencia de medidas de contención tras la corrida cambiaria postelectoral.

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