En el marco de la investigación que el Ministerio Público Fiscal lleva adelante por el homicidio de Jonathan Caracciolo, en la mañana de hoy se realizó una audiencia de autorización jurisdiccional, en la búsqueda por obtener prueba necesaria para avanzar en el legajo penal.
A partir de nuevos informes realizados por el Cuerpo de Investigaciones Judiciales de la Policía de Río Negro, el Fiscal requirió la apertura e incautación de datos de siete de los teléfonos celulares secuestrados en algunos de los múltiples allanamientos que se realizaron luego del hecho.
La acusación púbica y el abogado que representa a la familia de la víctima (que manifestó su adhesión al pedido) requirieron la pericia para poder tener precisiones relacionadas con la titularidad de los mismo y su uso. Se pretende acceder al registro de llamadas entrantes y salientes y a la información de las aplicaciones de mensajerias y redes sociales que pudiera estar relacionada con el hecho.
El fiscal recordó que el hecho se produjo el 4 de julio, pasadas las 23 horas en el marco de un tiroteo entre un grupo de personas, entre ellas tres que ya fueron notificadas de una causa penal que se sustancia en su contra. Como consecuencia de esos disparos, falleció la víctima alcanzada por uno de ellos en instancias en que se encontraba en cercanías del lugar.
Si bien el defensor oficial se opuso a la medida, requiriendo mayor precisión a los informes que el área de investigación de la policía confeccionó y que sustentan tal pedido, el Juez de Garantías hizo lugar al requerimiento. Las pesquisas serán realizadas por la Oficina de Investigación en Telecomunicaciones de la Procuración General.