Una mujer de Cipolletti que se encuentra con un embarazo avanzado requirió una cuota alimentaria para afrontar los gastos médicos. Durante el proceso judicial consignó que se alejó de su pareja por episodios de violencia y que él no le hizo más aportes económicos. El fallo hizo lugar a su pedido y, como medida cautelar, fijó un periodo de cobertura de 90 días posteriores al nacimiento.
La mujer explicó que, tras una relación intermitente de seis años, quedó embarazada en 2023. Según su relato, aunque al principio el padre demandado mostró interés, eventualmente dejó de brindarle apoyo económico y emocional. Además de los episodios de violencia que refirió, ella sostuvo que él comenzó a mandarle mensajes en donde decía que no estaba seguro del embarazo.
La futura mamá afirmó que enfrenta dificultades económicas y ha asumido sola los gastos del embarazo.
El hombre, por su parte, reconoció la relación y la convivencia, aunque difirió en algunos detalles temporales. También ofreció una cuota alimentaria equivalente al 7 por ciento de sus ingresos hasta el nacimiento de la hija, propuesta que fue rechazada por la expareja.
La jueza de Familia de Cipolletti resolvió que el hombre demandado debe pagar una cuota alimentaria equivalente al 15 por ciento de sus haberes, deducidos únicamente los descuentos de ley, viandas y viáticos. Esta cuota tendrá efecto retroactivo desde la fecha de la notificación del requerimiento de mediación prejudicial, el 22 de febrero de 2024.
Además, la sentencia estableció que la cuota alimentaria continuará de manera cautelar por 90 días tras el nacimiento de la niña. Durante este período, las partes deberán instar las acciones correspondientes en torno a la filiación y la cuota alimentaria definitiva.
La jueza también ordenó notificar a la empleadora del demandado para que realice las retenciones correspondientes de los haberes y las deposite en la cuenta judicial del caso.