La ministra de Seguridad y Justicia de Río Negro, Betiana Minor, encabezó un acto en el que se culminó la primera etapa del proyecto “Masculinidad(es) Hegemónica(s) y Violencia” y se presentaron los resultados de la misma los cuales fueron sumamente positivos.
La iniciativa, cuyo cierre fue desarrollado en la Plaza Seca de Viedma, consiste en una propuesta innovadora para el trabajo con hombres que ejercen o han ejercido violencia contra las mujeres, y que integra la estrategia de trabajo del Ministerio de Seguridad y Justicia. En este sentido, Minor destacó que el proyecto forma parte de la política central de la cartera a su cargo.
Estuvieron presentes en el acto, la jueza del Superior Tribunal de Justicia de Río Negro, Liliana Piccinini, el intendente de Viedma, Pedro Pessatti, el Defensor General, Ariel Alice y el Fiscal General, Fabricio Brogna, entre otras autoridades provinciales, municipales y agentes públicos.
Durante esta primera parte del proyecto, se capacitó a los equipos del Área de Género del Ministerio que conforman la primera red de alerta y monitoreo, al tiempo que se implementó bajo la modalidad de prueba piloto, un dispositivo grupal, complementario y alternativo para el abordaje de las problemáticas de las masculinidades y las violencias.
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Además se contó con el financiamiento del Consejo Federal de Inversiones (CFI) y se trabajó de manera mancomunada con el Centro Marie Langer de España, la Agencia Más Estado y el Instituto para la Gestión (IDI).
La subsecretaria de Políticas de Articulación de Seguridad y Justicia, Lorena Bacci, una de las referentes del trabajo presentado, resaltó dos grandes resultados obtenidos. Uno de ellos orientado a la formación de equipos que asegure la replicación bajo la metodología de Procesos de Corrección Comunitarios cuyas características son las que mejor se ajustan a nuestra realidad. “Esta metodología la diseñó el Instituto que impartió la capacitación, un instituto con más de 40 años de experiencia, que tiene proyectos de intervención comunitaria de estas características en diferentes lugares del mundo”, comentó.
Por otra parte agregó: “Creemos que esta es la metodología porque parte de un lugar muy importante que entiende que la violencia contra las mujeres no es una cuestión patológica de un varón. Entiende que responde a una estructura patriarcal que nos atraviesa a todos diariamente, no todos los varones son violentos pero los micromachismos también nos atraviesan todos los días. Entonces eso es el gran acierto del proyecto, elegir un abordaje que se para desde este lugar, que empieza a trabajar como un dispositivo de intervención comunitaria”.
A su vez resaltó otro resultado que tiene que ver con lo institucional en un trabajo con el Poder Judicial que incluye a fiscales y defensores: “Haber trabajado con el Poder Judicial y encontrado un entramado jurídico para que esto funcione, para que sea desde la propia defensa, una propuesta para los varones. Un dispositivo complementario y alternativo a las medidas que ya existen”, explicó.
Trabajar para cambiar las realidades
La ministra Minor reconoció y agradeció a los equipos que se encuentran trabajando en el proyecto y adelantó los pasos a seguir en cuanto al mismo: “Este primer semestre vamos a capacitar a todos los equipos técnicos del Instituto de Asistencia a Presos y Liberados (IAPL) y del Servicio Penitenciario. Haremos la misma prueba piloto que acabamos de hacer con los dispositivos duales, con los varones supervisados bajo el IAPL”.