Con motivo del Día Mundial de la Hipertensión Arterial, que se conmemora cada 17 de mayo, la Secretaría de Salud, a través del área de Coordinación de Programas Sanitarios recuerda a la comunidad que es fundamental tomar medidas de prevención y control de forma permanente.
Por la pandemia que se vive a nivel mundial, este año no fue posible la realización de las actividades habituales que se llevan adelante en el Distrito, en pos de crear conciencia en la comunidad.
Sin embargo, es una día propicio para tomar en cuenta que esta enfermedad tiene una relación directa con complicaciones como infartos y accidentes cerebro vasculares.
Además, puede causar consecuencias como la insuficiencia renal o disminución de la visión.
En algunos casos esta enfermedad se manifiesta a través de síntomas como dolor de cabeza, zumbidos en los oídos, mareos y/o palpitaciones.
La manera de detectarla a tiempo es controlar periódicamente la presión arterial y tomar en cuenta que algunos factores que favorecen la hipertensión son la predisposición genética familiar, obesidad, sobrepeso, falta de actividad física y una mala alimentación.
¿Cómo prevenimos?
Se recomienda reducir la ingesta diaria de sal, principal factor de riesgo de esta enfermedad. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda un consumo máximo de 5 gramos por día.
Dos recomendaciones fundamentales son comer frutas, vegetales, granos enteros y lácteos bajos en grasas; disminuir el consumo de grasas; y reducir la ingesta de sal en la alimentación, quitando el salero de la mesa, cocinando con menos sal y reduciendo el consumo de alimentos procesados.
Se aconseja moderar el consumo de alcohol, realizar actividad física diariamente y mantener un peso adecuado.
La presión arterial es un enemigo silencioso. Actuar a tiempo; con hábitos saludables y controles periódicos, permitirá prevenir sus graves consecuencias.