«Avanzar hacia mejores condiciones de vida para todas las personas es una obligación de los Estados”, dijo Nora Aurora Cader, Defensora del Pueblo de Viedma, en referencia a las situaciones de acoso e inseguridad que sufren mujeres de todas las edades al utilizar el transporte público.
Repudió estos hechos y pidió que se aplique todo el rigor de la ley para sancionar a los responsables y alentó el crecimiento de la participación laboral de las mujeres en ese sector.
Indicó que, tal como planteó en su último informe anual, elevará a consideración de las y los concejales un proyecto de ordenanza que “establezcan políticas que permitan por un lado garantizar la seguridad de niñas, adolescentes y mujeres adultas que utilicen el servicio de taxis y por otro alentar el crecimiento de la participación laboral de las mujeres en el sector del transporte”.
Señaló que «avanzar hacia mejores condiciones de vida para todas las personas es una obligación de los Estados, y en este esfuerzo se incluyen las políticas que permitan superar diversas situaciones de discriminación, acoso o inseguridad que sufren las mujeres como individuos y grupo social».
Cader detalló que la iniciativa consiste por un lado en establecer la gratuidad del trámite del registro profesional para todas las mujeres de la ciudad que deseen obtener el carnet profesional de conducir para incorporarse al mercado laboral en el ámbito del transporte de personas y mercaderías y explicó que por otro lado el objetivo es “avanzar en la búsqueda de un mecanismo de identificación de las empresas, bases y unidades de taxis que cuenten con choferes mujeres, para que las mismas puedan ser solicitadas por mujeres de todas las edades, cuando viajen solas, con pares o con hijos menores de edad”.
Sobre el mecanismo que podría implementarse, enumeró “letreros magneticos o adhesivos sobre el exterior de los taxis, luces de determinado color que puedan ser identificados como tal en horario nocturno y con cartelería en las bases o paradas de taxis de la ciudad que informen de la disponibilidad de unidades manejadas por taxistas femeninas» y precisó que «más allá del mecanismo que finalmente se seleccione, es importante por un lado realzar el rol de las mujeres que se animan a romper con viejos preconceptos y se dedican a actividades que no muchos años atrás algunos sectores de la sociedad creían que eran exclusivas del género masculino y por el otro brindar tranquilidad y seguridad a las mujeres que quieren utilizar el transporte público conducido por una persona de su mismo género».
Cader refirió que «medidas similares, siempre enmarcadas en sus propias realidades, se han tomado en otros países del mundo con el objetivo de brindar mayor seguridad a las mujeres a la hora de viajar en el transporte público. En nuestro país ya hay contadas y exitosas experiencias que han permitido avanzar en este sentido de brindar un transporte exclusivo por y para mujeres. En 2016 una de las primeras en ponerse en práctica fue «She Taxi», una aplicación creada por una mujer taxista de la ciudad de Rosario, que hoy cuenta con cerca de 150 conductoras en Santa Fe y Córdoba y con miles de usuarias habituales».
En relación a políticas públicas tendientes a incrementar la presencia de las mujeres al comando de las unidades de transporte público, la Defensora del Pueblo destacó la gestionada en 2020 por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, por la implementación de BA Taxi, una app gratuita de la Ciudad que conecta a pasajeros con taxistas profesionales y brinda la alternativa de pago mediante efectivo, tarjeta de débito, crédito y QR y que encuentra disponible para los sistemas operativos Android y iOS y remarcó que el Gobierno de la Ciudad “formalizó una convocatoria pública para incorporar mujeres taxistas hasta llegar al número 2000, sobre un total de 39.000 conductores».
Cader afirmó que «en una ronda de consultas por las principales empresas de radiotaxis de la capital rionegrina desde esta Defensoría del Pueblo pudimos conocer que en las distintas bases hay entre un 5 y un 10 por ciento de mujeres al volante de un taxi en relación a la cantidad total de varones que realizan esa tarea. Aunque parece un numero bajo, no lo es tanto, si se tiene en cuenta que datos oficiales indican que a nivel nacional la participación laboral de las mujeres en el sector del transporte apenas alcanza el 6 por ciento y que menos del 1 por ciento se dedica a manejar un taxi o un vehículo enrolado en una aplicación de transporte. Podemos destacar que en Viedma se multiplica por varias veces el indicador nacional de mujeres al volante de un taxi».
Remarcó que a pesar de que no haya normativa específica en la materia, los operadores de las bases indican que es más que habitual que las usuarias y usuarios se comuniquen con las bases para solicitar específicamente el servicio de taxis conducidos por mujeres, especialmente cuando se trata de traslados de niñas, niños, adolescentes o mujeres de todas las edades, “por lo que avanzar en ese sentido es más que necesario» y señaló, además, que «sin más y a la espera de que se avance en la temática y en los modos en lo que esta identificación de las unidades de taxis conducidas por mujeres pueda materializarse quedamos a su disposición y a la de todos los actores que quieran realizar su aporte».
En esa línea, la Defensoría del Pueblo aseveró que “en contactos con el Sindicato de Peones de Taxis de Viedma y Patagones se estimó que en la Comarca hay unos 500 trabajadores del sector, de los cuales sólo 50 son mujeres, aunque insistimos es un número mayor a los porcentajes que se registran a nivel país. Los empresarios del sector, los titulares e incluso los propios taxistas varones coinciden en destacar a las taxistas mujeres, como «más trabajadoras», «son cumplidoras», «son más responsables», «cuidan más el auto».
Y aseguró que desde el mismo Sindicato reconocen que es habitual que madres y padres requieran a las bases de radio taxis el servicio de taxis conducidos por mujeres, especialmente para el traslado de niñas, niños y adolescentes que deben movilizarse si un mayor que los acompañe porque «brindan mayor tranquilidad a las familias». Y señaló, además, que estadísticas nacionales indican que un 70 por ciento de las licencias de conducir particulares que se emiten en el país son requeridas por varones, “esto nos demuestra cabalmente que las normas culturales existentes y la ausencia de políticas públicas con perspectiva de género alejan a las mujeres de la industria del transporte y la conducción. Y por lo tanto es una tarea de todas y todos trabajar con todas las herramientas que tengamos a nuestro alcance brindar: alternativas laborales para el universo femenino; la posibilidad de escoger un transporte por y para mujeres; atender a la demanda de comodidad y seguridad; evitar situaciones de acoso, abuso y o inseguridad”.